El Super Bowl LV, que tendrá lugar el 7 de febrero en Tampa (este de Florida), será “histórico” no solo porque por primera vez en sus 55 ediciones uno de los equipos jugará en casa, sino por la seguridad frente a la COVID-19, dijeron este lunes sus organizadores.

Queremos que la gente venga sana y regrese a su casa sana”, dijo la alcaldesa de Tampa, Janet Castor, en una rueda de prensa en la que auguró que la “victoria será de los Buccaneers (bucaneros)”, quienes con Tom Brady como máxima estrella se enfrentarán a los Chiefs de Kansas City, donde brilla con luz propia Patrick Mahomes.

Castor dijo que las únicas personas que van a sentirse “decepcionadas” si vienen a Tampa son los seguidores de los Chiefs, porque su equipo no se va a llevar el llamado Super Bowl.

Los Buccaneers se aseguraron este domingo en Wisconsin el pase para el Super Bowl con su victoria contra los Packers de Green, que les dio el título de la Conferencia Nacional (NFC).

Para los Chiefs será su segundo año consecutivo en la final. En el Hard Rock Stadium de Miami se llevaron su primer trofeo Vince Lombardi al derrotar a los 49ers de San Francisco por 31-20.