El término realidad
es mucho más circunstancial
que absoluto.
Gianni Vattimo
Arturo Suárez Ramírez
Estimados amigos lectores, muchas gracias por su tiempo para la lectura de la presente columna que se publica en este prestigiado medio de comunicación. A un año del triunfo de Andrés Manuel López Obrador, no hay nadie que políticamente se le ponga en frente, ni partido ni figura. AMLO ganó la elección de manera contundente y dejó al borde de la muerte, política claro está, al Partido Revolucionario Institucional, Acción Nacional y al de la Revolución Democrática.
Los institutos políticos mencionados, no han sabido sobreponerse al golpe, que primero que nada, vino desde dentro por la conquista de la candidatura, en el caso del PAN, Ricardo Anaya se apropió del andamiaje, mintió, rompió relaciones y traicionó, todo en aras de sus propios intereses. Tanto que hoy no se les ve un liderazgo, ni nuevo ni de la vieja guardia, que los pueda sacar del atolladero en el que se metieron.
Los viejos del PAN ya no tienen la fuerza o no quieren tomar la responsabilidad de ser esa oposición histórica que ejercieron en los ochenta y noventa. Las nuevas generaciones de panistas, no saben ser oposición, porque no nacieron en ella, nacieron siendo gobierno y se arrodillaron ante el sexenio de Peña Nieto.
Mientras que el PRD se convirtió en un partido chatarra, lo desmantelo López Obrador, pero los “Chuchos” son responsables de su debacle, comieron de la mano del régimen peñista, se convirtieron en comparsa del PRI, y no les quedo más que ser segundones en la elección pasada. Seamos claros, por si solos no ganarían ni en una colonia, las pocas posiciones que tienen fueron por las alianzas.
El PRI hoy vive un proceso para renovar su dirigencia donde la mano del presidente está metida, el ex gobernador de Campeche Alejandro Moreno Cárdenas, tiene lo moreno más allá del apellido. El mismo se ufana de tener el apoyo de López Obrador. En los próximos días el PRI será títere del régimen. Así, igualito que ellos lo hicieron en el pasado, y un punto más, los tricolores nunca han sido oposición.
Por eso los de Morena ni los escuchan en las secretarías, menos López Obrador, y en las cámaras senadores y diputados son inocuos, y los morenos todo le pasan a favor del presidente. No les queda más que dar conferencias de prensa, denunciar y francamente hasta aburridos son.
Ellos son responsables del vacío de oposición y de no haber contrapesos.
¿Así que cual oposición responsable?
Entre Palabras
Qué tal se placearon Carlos Slim y Emilio Azcárraga por la plancha del zócalo, acudieron gustosos al auto homenaje que se hizo Andrés Manuel López Obrador. ¿Ya los perdonó? ¿Ahora son amigos? ¿Qué no eran neoliberales?
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Muchas gracias y hasta la próxima.
