Millonarias pérdidas económicas se están registrando por el cierre de las zonas arqueológicas para prevenir los contagios del Covid-19 en Yucatán y muchas otras zonas del país; En el caso de Yucatán tan solo Chichén Itzá dejó de percibir más de 110 millones de pesos.
Datos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) señalan que durante los siete meses que estuvo abierto el sitio de Chichén Itzá sólo obtuvo 50 millones de pesos, es decir, apenas captó 31% de lo obtenido en el año 2019, que fue de 160 millones de pesos.
Asimismo, el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) reportó que los pasados meses de enero y febrero la visita a zonas arqueológicas y museos de Yucatán se desplomó en 70%, situación que se agrava pues como consecuencia de la pandemia en la entidad sólo se permite el acceso a siete de 17 zonas arqueológicas.
Por el momento, sólo están abiertos al público siete sitios de monumentos arqueológicos, mientras que los 10 restantes, llevan casi un año de permanecer cerradas.