- Las Malas Palabras de esta semana tienen que ver con la TRAICIÓN, esa falta imperdonable que comete quien no cumple con su palabra o aquel que, con sus acciones genera un daño moral al faltar a la confianza
Marta Obeso
En derecho, una traición es sinónimo de DELITO, y engloba a una serie de crímenes entre los que se encuentran los que atentan a la soberanía de nuestro país.
Nos encontramos en periodo de elecciones y “más pronto caerá un HABLADOR que un cojo”, por aquello de que miles de aspirantes a obtener un puesto de elección popular habrán de salir a las calles a prometer y prometer, sin comprender la gran DEFRAUDACIÓN que cometerán al no cumplir sus promesas.
Aunque hubiera, nadie afirmará la existencia de políticos virtuosos capaces de contraer, respetar y cumplir desde la conciencia, ese compromiso que permite a la sociedad el beneficio del poder de gobernar.
Al igual que pasa en las relaciones amorosas, los amlover´s han perdido la confianza, luego han experimentado la decepción que produce el incumplimiento de más de mil promesas hechas por el jefe del Ejecutivo, entre las que se encuentra la venta del avión presidencial, la ayuda a zonas marginadas del sur del país, resolver la crisis de inseguridad que vive México y erradicar la corrupción… y no se pueden citar más porque no alcanza este espacio.
El sentimiento de la traición es profundo y trascendente, más intenso cuando se tiene la certeza de quien traiciona habría de actuar dentro de ciertos límites, respetando reglas específicas y sirviendo rumbo a un fin claro y previamente determinado.
El hecho de que la traición sea la causa que ROMPE el vínculo que causó euforia durante la creación del lazo de unión, no es un asunto menor, ya que el INCUMPLIMIENTO de compromisos es una de las experiencias que difícilmente se OLVIDA.
De forma paralela a la DECEPCIÓN que Andrés Manuel López Obrador ha provocado entre sus seguidores, tenemos el gran RETROCESO y ESTANCAMIENTO en el que se encuentra México, a los que habrá que sumarles los efectos de la pandemia.
Cuando alguien comete traición lo hace de manera DELIBERADA, a sabiendas de que está faltando a su palabra, causando un DAÑO intencionado, directo; por lo que la traición, a lo largo de la historia ha sido considerada una de las peores ABERRACIONES que puede cometer un ser humano.
Así lo describe William Shakespeare en su obra El rey Lear, en la que asegura que la traición es peor que cometer un ASESINATO. Un traidor, crítica, cuenta los secretos que le fueron confiados, no valora la amistad y busca mil pretextos para justificar por qué, no avanza en su trabajo.
Un traidor ANIQUILA esa devoción que los hacía aliados, le da la espalda a aquellos que lo apoyaban, no tiene honor, no cumple leyes, no agradece y no sabe mostrar afecto por nadie y por nada. Los traidores finalmente terminan quedándose solos y es muy poco probable que alguien vuelva a valorarlos como personas de bien. Así que un traidor sabe cómo cavar su propia tumba, ya veremos qué es lo que sucede con Morena el próximo 6 de junio.
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