Luis Mena Pantoja 

Tras una trayectoria artística internacional de 57 años, el cantautor español Joan Manuel Serrat se despedirá de los escenarios con un concierto masivo en el Zócalo capitalino, el próximo viernes 21 de octubre a las 20 horas. Esta presentación musical de acceso gratuito se enmarca en la 50 edición del tradicional Festival Internacional Cervantino, en la cual la Ciudad de México es invitada de honor junto con la República de Corea. 

Cabe señalar que, en esta 50 edición del Festival Cervantino, aunque se mantiene el estado de Guanajuato como sede principal, se tendrán réplicas en más de 20 entidades del país, entre las que están la Ciudad de México. En total, participarán dos mil 500 artistas de 33 países, que presentarán 160 actividades escénicas y 90 interdisciplinarias, entre conciertos, obras de teatro, danza y exposiciones. 

“Este año, estamos celebrando el reencuentro, esta es la fiesta de la esperanza, de los derechos culturales, esta es la fiesta donde nos encontramos todos, no hay ninguna cultura que no sea bienvenida en México, todas las culturas de todos los países son bienvenidas en este festival. La cultura nos une, si no nos unimos a través de las raíces culturales ¿cómo lo vamos a hacer en una época de la división de la humanidad? Justamente la cultura va a ser ejemplo de cómo podemos juntos soñar un futuro distinto”, afirmó la secretaria de Cultura federal, Alejandra Fraustro Guerrero. 

El concierto de Serrat forma parte de la gira “El vicio de cantar: 1965-2022”, con la que el músico originario de Poble-sec, Cataluña, pone fin a su fecunda trayectoria. Al respecto, el intérprete ha anunciado que en este concierto recorrerá los temas más populares de su carrera, desde sus inicios en el movimiento catalán de la Nova Canco hasta su segundo homenaje del poeta español Miguel Hernández, Hijo de la luz y de la sombra (2010). 

Joan Manuel Serrat nació el 27 de diciembre de 1943 en Barcelona, al interior de una familia obrera. Su padre, José Serrat, fue un anarquista español y su madre, Ángeles Teresa, un ama de casa. Pasó su niñez en las calles de su barrio, que lo marcaron profundamente, al punto que muchas de sus canciones narran la cotidianidad de Cataluña tras la Guerra Civil. 

La larga relación entre el músico y poeta catalán con México inició hace 53 años, el dos de noviembre de 1969, cuando el noi del Poble-sec se presentó en el Palacio de Bellas Artes, con un público lo recibió en un mar de aplausos, mucho antes de consolidarse como uno de los grandes representantes de las voces disidentes. 

Posteriormente, en 1975, mientras estaba de visita en México, condenó al régimen franquista y sus medidas de represión que causaron la muerte de tres personas, lo que le llevó a permanecer exiliado durante un año en nuestro país, a causa de una orden de búsqueda y captura que se emitió contra él. Al no poder regresar a España, realizó una extensa gira de nueve meses por toda la República Mexicana. 

Esta será la segunda ocasión en la que el cantautor se presente en la plancha del Zócalo, ya que en 2006 participó en un gran concierto en solidaridad con las mujeres asesinadas de Ciudad Juárez, Chihuahua.