• Escasez de oxígeno ha provocado desesperación, aumento de precios, robos y fraudes 
  • El costo de un tanque creció hasta 543% y una recarga 176% durante el mes de enero 

María Escalante García   

El COVID-19 se ha convertido en un viacrucis para las personas que lo padecen, pero también para los familiares, sobre todo en el tema de la escasez de insumos, como el oxígeno medicinal. Dicha situación ha causado el incremento en precios, robos, fraudes para lucrar con la desesperación y dolor de las personas.   

El precio de un tanque de oxígeno de 680 litros durante el periodo de noviembre y diciembre tenía un costo promedio de 2 mil 800, actualmente se encuentra hasta en 18 mil pesos, lo que representa un incremento de 543%. En tanto una recarga que en noviembre y diciembre tenía un costo de 250 pesos, ahora cuesta hasta 690 pesos promedio, lo que significa un aumento de 176%.  

Ante el número creciente contagios por coronavirus, el oxígeno es usado como tratamiento prioritario para los más graves. En entrevista para IMPAR el periódico, el doctor Luis Colín Lizalde, comentó que es ampliamente recetado a pacientes en los servicios de emergencias, o durante la hospitalización. 

“El oxígeno es utilizado cuando se detecta una saturación de oxígeno, por debajo de 90%, es indispensable en aquellos que son ventilados mecánicamente en unidades de cuidados intensivos, como sucede en nuestros días en los cientos de pacientes que padecen Covid-19”, afirmó el doctor.  

La duración de un tanque de oxígeno puede variar de acuerdo a lo señalado por el especialista, quien ejemplificó la durabilidad, “el tanque que se usa en un domicilio que es de 9 mil 500 litros a un volumen de tres litros por minuto, siendo esta la tasa normal de apoyo con oxígeno, puede durar hasta 50 horas”  

Agregó, “un tanque portátil que utilizan los pacientes para deambular, de 682 litros a esa misma tasa de volumen antes mencionada, duraría entre 3 y media y 4 horas.  

Falsos métodos 

La falta de información, así como la desesperación por salvar la vida de su familiar ha llevado a las personas a utilizar otros métodos que no son los indicados como el “oxígeno casero”, a través de redes sociales circulan videos acerca de cómo sustituir el oxígeno medicinal mediante un compresor y agua de oxígeno. 

El doctor Luis Colín manifestó que lo único que se logra con este tipo de métodos es simplemente impulsar el aire ambiente, el cual normalmente tiene una concentración de oxígeno 21%, no del 93% que contiene un tanque, esto solo provoca que el aire ambiente de mueva con mayor fuerza, por lo que no representa una ventaja para el paciente y es una falacia.  

Finalmente, el también especialista en cardiología comentó que el aumento de precios para adquirir un tanque de oxígeno es una desgracia y falta de solidaridad con la gente que necesita el apoyo de este insumo.  

Espera excesiva  

En Impar, el periódico realizamos aproximadamente diez llamadas para conseguir un tanque de oxígeno, de las cuales no se obtuvo una respuesta favorable e incluso el tiempo de espera para que se respondiera la llamada fue de más de 10 minutos.   

Lo mismo sucede al acudir a los lugares donde se comercializa el producto, las filas son largas y el tiempo de espera es una eternidad, a esto se suma la escasez de los cilindros por lo que inclusive la Profeco hizo un llamado a devolver los tanques de oxígeno, rentados o comprados para que puedan ser ocupados por otro enfermo de Covid-19. 

Fraudes y robos   

Personas usuarias se han quejado de sufrir estafas al comprar un tanque, la desesperación ha hecho que delincuentes lucren con el dolor ajeno. Tal es el caso de una familia en León, Guanajuato que pagó 6 mil pesos por un tanque de oxígeno y sin saber recibió uno de helio.  

Los robos de este producto también han afectado a la escasez del oxígeno, Estado de México ocupa el primer lugar en este delito, con cinco casos, seguido de la Ciudad de México con tres reportes y Tlaxcala con dos.   

Asimismo, el mercado negro en internet ha comenzado a comercializar tanques que anteriormente contenían oxígeno industrial (acetileno) provocando ya la muerte al menos de dos personas en Coahuila.