• La prevalencia de mexicanos afectados es del 16 y 20%, además siete de cada diez mexicanos viven con sobrepeso u obesidad 

María Escalante García  

“En el tema de la diabetes seguimos estando en los primeros lugares, la prevalencia de cuantas personas se encuentran afectadas es del 16 y 20%, dependiendo de la serie que se tome, y la otra cifra que es relevante de tomar es que siete de cada diez mexicanos viven con sobrepeso u obesidad, que es uno de los factores en común tanto para la diabetes como para el hígado graso”, señaló Mijail Tapia. 

En entrevista para Perspectiva Empresarial el médico especialista en diabetes indicó que en cuanto al término hígado graso, se refiere a que en dicho órgano se encuentra grasa, es decir más del 5% del tejido hepático, ahí se comienza a hablar de este problema, anteriormente se clasificaba en alcohólico y no alcohólico, ya que se relacionaban problemas del hígado con el consumo del alcohol. 

“Actualmente se habla de una disfunción metabólica que normalmente tiene que ver con el aumento de la grasa, la resistencia a la insulina, consumo de algunos alimentos que es lo que lleva a que se presente el hígado graso”, expresó el especialista.  

Agregó que existe un fenómeno fisiopatológico, es decir que lleva a la enfermedad, este es la resistencia a la insulina, lo cual va a favorecer la expansión de la grasa que típicamente se puede localizar en los depósitos subcutáneos, debajo de la piel, pero en determinado momento se deposita fuera del lugar, algunos de los órganos donde se puede hallar es el páncreas, pero el ejemplo más certero es el hígado. 

Ese deposito eventualmente supera la capacidad y entonces se tiene una resistencia a la insulina tanto en el hígado como por fuera lo cual a lo largo del tiempo es lo que lleva a que se desarrolle prediabetes como diabetes.  

La relación de dichas enfermedades es bidireccional, es decir tanto el hígado graso favorece la diabetes como la diabetes al hígado graso, porque las dos tienen el factor en común que es la resistencia a la insulina, que los acelera. En personas que solamente tengan hígado graso se tiene que buscar activamente datos de resistencia a la insulina en estudios de laboratorio e incluso datos de diabetes o prediabetes.  

En las personas que tiene diabetes, el 70% de las personas con dicha enfermedad, tienen el riesgo de tener hígado graso, pero actualmente en las últimas guías que salieron a finales de 2022 y principios de 2023 de la Asociación Americana de diabetes ya se sugiere o recomienda buscar activamente no solo el hígado graso sino la fibrosis hepática, es decir una cicatrización del tejido.