El expresidente Pedro Castillo afirmó que está “injusta y arbitrariamente detenido” y pidió a las fuerzas de seguridad de Perú que “depongan las armas y dejen de matar a este pueblo sediento de justicia”, durante una audiencia en la que el Tribunal Supremo revisa la apelación al arresto preliminar que se dictó en su contra el miércoles pasado.