Bernardo López 

Se asoma la punta del iceberg de toda la trama que se diseñó para realizar un golpe de Estado en contra del gobierno de Donald Trump, que se disfrazó en las elecciones de 2020, para imponer a como diera lugar a Joe Biden, quien al parecer tiene graves problemas mentales, no pasó desapercibido el comentario del presidente de Rusia, Vladimir Putin, al desearle ‘buena salud’ al mandatario estadounidense. 

Ya habíamos analizado como se usó la censura contra Trump en la televisión y redes sociales fascistas estadounidenses, para silenciar toda la información que hablara sobre el fraude en las elecciones de 2020, esa es una parte. Otro elemento que confirma la estrategia surge de una corrección que hace el periódico The Washington Post, que emitió una ‘corrección’ a su historia ‘Find the fraud’ -Encuentra el fraude-, en la que se tergiversaron las citas adjudicadas al entonces presidente de Estados Unidos. 

En realidad, lo que dijo Trump fue que se realizara un escrutinio en las boletas del condado de Fulton, Georgia, para ver si había algo deshonesto, y también le dijo al investigador que estaba realizando el trabajo más importante en el país, mientras que en el texto original del periódico se dijo que el entonces presidente urgió al investigador a ‘encontrar el fraude’ y que sería un ‘héroe nacional’. 

Este evento es parte de toda la andanada que confirma la hipótesis de golpe de Estado contra el Gobierno de Estados Unidos, para arrebatarle el poder a Donald Trump, pues el político ha denunciado que aún no se ha realizado una auditoría apropiada o verificación de firmas en el condado mencionado, además que el documento que valida las elecciones no fue aprobado por la Legislatura de Georgia. 

Los legisladores de Georgia realizan acciones para intentar enmendar las fallas que se presentaron en las elecciones pasadas y restaurar la confianza en las instituciones, en las que recaen todas las acusaciones del fraude electoral. Existen dos proyectos que buscan regular el voto ausente, para que las personas que utilicen este medio de sufragio tengan que registrar algún número de identificación, ya sea permiso de conducir, tarjeta de identificación estatal o los cuatro últimos dígitos de su número de seguridad social.  

En el Estado buscan mirar hacia el presente y al futuro con nuevas reglas electorales, pero parece que el pasado inmediato les incomoda, pues lo que sucedió y sucede en Fulton son un botón de muestra. ¿Cuántos gobiernos estatales y condados de ese país se encuentran en la misma situación?